Terror

HeavyMetal
Aquella noche, el viento soplaba tan fuerte que terminó rompiendo los cristales.
Yo estaba tumbado en la cama. El frío era terrible.
Por las ventanas rotas comenzaron a entrar murciélagos y ratas.
Los murciélagos descendían y se posaban sobre mí para chuparme la sangre.
Las ratas, excitadas por olor de la sangre, subieron a mi cama y comenzaron a correr sobre mi cuerpo, frotando contra mi piel sus peludos vientres.
Mi ingle era un cruce de caminos, tantas ratas pasaban que terminé por correrme.
Los cuidadores sintieron ruido en mi habitación.
Cuando abrieron la puerta el espectáculo era dantesco.
Me vieron chorreando sangre.
Las ratas se habían comido mi polla y se habían metido en mis intestinos.Los murciélagos, o sea, las brujas, volaban sobre mí con sus escobas festejando el día de los muertos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya, va a ser que llevabas razón. Este relato es una tanto "tétrico". Fué un placer compartir una viaje tan largo (hasta Portugal) en la tarde de ayer. He cumplido con mi parte y me he leido todas tus entradas "Heavymetal", esperaré espectante las siguientes.

Anónimo dijo...

Muchísimas gracias por leer mi relato. Espero que nos encontremos aquí muchas veces. Besos.