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TELEGRAMAS.

Aicha, querida madre mía:
El viaje ha sido placentero. Tanto la tripulación como el resto de pasajeros se han portado muy bien conmigo. Con un mar calmoso de por medio rememoré el tiempo de los juegos junto a aquellos almendros secos cerca de la casa de Mhammed. Ya no andaré más por los pedregales de Burundi, pues mi sueño pronto comenzará a cumplirse. Os quiero.

Ismail. Diciembre de 2002.

Mhammed, hermano mío del alma:
He pasado mucho miedo. Todos los ahorros de la familia los pagué para viajar a Canarias desde Mauritania. ¡Qué locura! Las olas eran de cinco metros e íbamos treinta personas en una lancha a motor. Creía que íbamos a ahogarnos. Al llegar he tenido que correr, pues han detenido a casi todos los que iban conmigo, pero ahora soy libre en Europa. Te echo de menos.

Ismail. Diciembre de 2002.

Aicha, querida madre mía:
Todos me respetan y quieren. He conseguido, en estos dos años, llegar a trabajar como médico y no dejo de evocar el esfuerzo realizado por toda la familia para que pudiese estudiar en Bujumbura. Me acuerdo mucho de todos y lucho para poder traeros conmigo. Un abrazo.

Ismail. Enero de 2004.

Mhammed, hermano mío del alma:
Quiero volver a Burundi y no sé cómo hacerlo, pues parece que a los ilegales nos embarcan en aviones y sueltan, cual borregos, en el país que ellos quieren. Necesito ayuda para volver a veros. Me han pegado palizas varios jóvenes blancos sin más, me han tratado como a un esclavo recogiendo plátanos y vivo en un viejo cuartel abandonado con unos sesenta africanos. Ahora tengo suerte porque vendo películas falsificadas, pero apenas me da para comer. Sigo en Europa y no sé qué hacer para poder escapar de esta mi jaula perenne. ¡Qué paradoja! Escapar de la pobreza para ser un esclavo y no existir. Espero abrazarte pronto.

Ismail. Enero de 2004.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy muy hermoso Siempre pienso porque el desarrolllismoo tiene estas trampas a los africanos les damos telfs moviles pero nadie les ayuda a cutivar su pan su mijo su tierra ...el gobierno no les ayuda para estudiar ¡¡ojala fueran japoneses de otras decadas

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo. Simple, directo y triste, a la vez que esperanzador. Real como la vida misma....

Anónimo dijo...

La historia que se repite. Los ricos necesitan a los pobres, como mano de obra barata, para seguir siendo ricos, y cuando son menos ricos, por la crisis económica, entonces los pobres sobran y se les deshecha.
Antes los españoles sufríamos lo mismo cuando emigrabamos a Suiza y Alemania... y ahora somos ricos

Anónimo dijo...

Los que vienen de otros sitios, gente diferente , gente de la diversidad. Me parece que está muy bien escrito. Enhorabuena!

Anónimo dijo...

Me encanta cómo está escrito. La impotencia ante tanta injusticia me deja muda.

Anónimo dijo...

Hay mucho relatos con personajes africano. Creo que la mayoría son escritos por gente no africana. Se nota porque les resta verdad.