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A Natalia


El despertar es un grito,
reclamo sonoro sin palabras
umbrío suicida el sueño
termina al alba
detrás del sol, el desayuno
para llenar el hueco del estío
por la dulzura de la mañana,
para tomar la histeria por el orbe
el desequilibrio
deambula por la casa
exige sin pausas
y roba las horas al reloj.
Un rasguño
a veces, una sonrisa
una mano que asiste
la razón,
el cuerpo en repetidos movimientos
y responde sólo
minúsculo universo
al idioma del amor.

1 comentario:

Anónimo dijo...

HERmoso PORMA ME RECUERDA A LA GENTE CON DOBLE FALTA O O CARENCIA HABLAR Y CAMINAR QUE PENA QUE EL HOMBRE LLEGUR A MARTE Y AQUI TODO SIN RESOLVER ¡¡¡ANIMO SIGUE ESCRIBIENDO