Iñaki
Procuro
escribir
y
cuando escribo
no
siempre me equivoco,
el
mundo es maravilloso.
Portazos
en el pasillo,
despiertan
al dormido
borrando
el trazo
de
un sueño inocente,
portazos
culpables.
Sonrisa
y guiños,
cariño
en el pasillo.
No
necesitas quererme,
no
necesitas hablarme,
una
puta sonrisa,
solo
una puta sonrisa
con
cierto arte.
Mujer
amorosa,
mujer
sensible,
mujer
al fin y al cabo,
mujer
grande.
Intimidad
que nos falta,
intimidad
que no existe,
intimidad
que nos roban,
puta
intimidad perdida.
Amanece
el día,
amanece
otra vida,
amanece
la alegría.
Si
vivo, no pienso
y
vivo emocionado,
me
enamoro, sonrío,
me
amargo, que la vida
es
una fruta
con
pepitas de amargura.
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