Series


Conchi
Yo me acuerdo, de pequeña, que me reía mucho con la serie de Benny Hill, porque hacía unas escenas que eran la rehostia. Era una tontería, pero la estaba esperando toda la semana. Me lo pasaba muy bien, mi madre me ponía la tele y aguantaba quietecita mientras duraba. No sé por qué no la vuelven a emitir.
También me gustaba “Falcon Crest”, donde había un chico que se llamaba Lorenzo Lamas, que le encantan las camas. Y Angela Channing era una artista de primera, excepcional, que tenía una bodega y viñedos y un halcón y muchos coches. Y luego estaba el chino haciendo artes marciales. Me gustaría que la pusieran otra vez, porque esas series son estupendas y es una pena que no las vuelvan a pasar. Tendré que piratearlas en Internet.
Ahora veo “Aquí no hay quien viva”, donde hay unas viejas cotillas y un casero. Siempre quieren casar al portero con una a la que llaman “la pija”. Y luego están la niña y el niño bonito, que no sé cómo se llaman. Y luego están los gays.
Cuando era pequeña, había otra serie, “Starsky y Hutch”, que también me gustaba mucho, sobre todo el moreno con el pelo rizado.
Ahora recuerdo otra serie, “Cristal”, (“mi vida eres tú y solamente tú.”) donde aparecía un macizo galaico: Luis Alfredo.
Por esa época me fui a veranear a no sé qué sitio de La Rioja, no muy lejos de Laredo, y allí conocí a José Luis y a Ventero, que se iban a meter a curas. Iban unos cuantos voluntarios: José, Peque...
Esos curas, sobre todo uno de ellos, yo creo que se enamoró de mí, porque tenía los ojos brillantes cuando me miraba.
Y luego se enamoró de una voluntaria que se llamaba Elsa, que le daba masajes en la espalda... o sea, como un Borgia. Y luego había cachondeo, porque nos bañábamos en una piscina y ya se sabe lo que son los cuerpos desnudos, lo mal que obedecen.
Nos íbamos a tomar algo por las noches, que yo, por cierto, estaba mala del estómago y mezclé bebidas y acabé fatal. Los últimos días devolvía todo, whisky y de todo.
Me salieron muchas úlceras sangrantes y me tuvieron que operar del estómago, una por cada copazo, ron, pacharán... Si no hubiera sido porque volví y mi madre me llevó al Clínico, a estas horas estoy criando malvas. Gracias a los cirujanos del Clínico, mis amigos, que a estas horas estoy viva.
Ahora me lo paso bien, pero no es como en aquella época. Para mí fueron los mejores años, todo era interesante, la tele y la realidad.

1 comentario:

Series Anatomy dijo...

Cuántos recuerdos me trae Falcon crest. Yo le dediqué esta semana también uno. Aquí os lo dejo ;)

http://seriesanatomy.blogspot.com.es/2014/01/el-seriatrico-falcon-crest.html

Saludos!